lunes, 25 de febrero de 2013

LA PROCESIONARIA                             
Aunque se acerca la Semana Santa, no estamos hablando de una procesión de nazarenos aunque sí de una procesión de gusanos.
Seguro que en estos días de primavera, paseando por algún bosque de pinos, si alzamos la mirada hacia lo alto de estos árboles, podremos observar que en la mayoría hay una especie de bolsas de seda con unos gusanos peludos en su interior. Mucho cuidado con éstos, porque no son tan inofensivos como pueden parecer. Se trata de una oruga llamada "procesionaria" parecida al gusano de seda.
Al llegar la primavera, saldrán de dichos bolsones por la mañana y se irán deslizando por el tronco del árbol, en procesión, en busca de un hogar apropiado para enterrarse bajo tierra, con el fin de transformarse en mariposas y a la espera de que finalice el verano y así volver a realizar una nueva puesta de huevos y comenzará un nuevo ciclo.
¿Cómo puedo eliminar estas bolsas?
Cada año se produce la defoliación de extensas masas forestales, ya que controlar la plaga de procesionaria considerada como la segunda causa más destructiva del pino, después de los incendios forestales, no es tarea fácil y aunque existan tratamientos químicos y se proceda a la destrucción de los bolsones (mediante su corta, recogida y quema), todavía hoy no se ha encontrado un método efectivo para eliminarla.
Pero, si no somos un árbol ¿de qué debemos preocuparnos?
A simple vista, la procesionaria no es más que un gusanito que ataca a los pinos y ya está, pero lo cierto es, que esta oruga posee unos pelos urticantes que dispersa a modo de defensa, cuando se ve amenazada, produciendo irritación en piel y mucosas.
Estos pelos se encuentran agrupados en el dorso de las orugas y actúan como arpones, ya que están provistos de unas puntas (como si fueran flechas) y cargados en su interior de una sustancia tóxica (taumatopenia), que al ser disparados por la oruga y clavarse en la superficie corporal, liberan histamina y producen urticaria.
El desplazamiento en hilera por parte de las orugas de procesionaria, despierta gran curiosidad en los animales, sobretodo en el perro, que con la intromisión de su hocico y lengua en dicha hilera, provoca una amenaza para la oruga, produciéndose el consecuente mecanismo de defensa por parte de ésta (disparando los pelos urticantes), y la presentación inmediata de los síntomas en el perro.
El propietario por lo general, no llegará a ver esa pelea entre la oruga y su perro, pues se produce de forma muy rápida, pero seguramente observará que el animal empieza a mostrarse intranquilo, jadeando más de lo normal, babeando y queriéndose frotar de forma persistente el morro con el suelo para aliviar el picor. En ese momento debe reconocer que se trata de una urgencia acudiendo el veterinario lo más rápido posible.
¿Cómo puedo prevenirla?
 A modo de prevención y si fuese posible, se deberían evitar los paseos por bosques de pinos durante los meses de Febrero a Abril, sobre todo si se va acompañado de algún perro, pero si no fuese así, llevarlo provisto de correa y bozal durante ese trayecto, debería bastar para impedir un contacto tan desagradable con la oruga de la procesionaria.
¿Cómo puedo eliminar la oruga?
Si se es poseedor de algún pino en la propiedad, eliminar los bolsones de procesionaria será una buena medida de prevención, ya sea utilizando tratamientos insecticidas durante el otoño o incluso procediendo a su corta y quema, siempre y cuando se realice bajo correctas medidas de seguridad (utilizando guantes, protegiéndose los ojos), y conociendo la técnica, así como evitar hacerlo en días de viento; solo así evitaremos conocer la experiencia de habernos encontrado con la hasta ahora desconocida oruga procesionaria.
Más información en Hospital Veterinario Animal Salud. Tel: 952411196. Urgencias: 666156641